Poema: Doscientos y tantos huesos

Vivo atrapado entre doscientos y tantos huesos. Estos huesos son los culpables de que sea yo tan corpóreo, tan pies en la tierra, tan tercera ley de Newton.
Si no fuera por estos huesos, ya hubiera volado, recorrido kilómetros hasta tu boca, para entrar en un suspiro, causado tal vez por un recuerdo, o en el mejor de los casos, por mis letras.

Una vez dentro, podría buscar a tu alma, presentarme ante ella, enamorarla, acompañarla, que seamos dos prisioneros de tus huesos, pues, de a dos, el cautiverio sería mucho mejor.
Podría tal vez encaminarme a encontrar tus ideas, jugar con ellas, revolverlas, asociarlas a este recuerdo mío, a este deseo, a este empeño de ser uno. Podría esparcirme por todo tu cuerpo, que tu piel toda se estremezca ante la seducción de mi yo-alma.
Que me sientas como beso cálido, y, juntos, recorrer el camino desde tu cama hasta noches de orgasmos y pasiones.

Por eso duermo, para soñar contigo, para sentir, por las noches, que soy doscientos y tantos huesos menos prisionero…
que estoy doscientos y tantos huesos más cerca de ti.

gracias. Poet@ EnRED@do.

Besooos!!!Fanny!!!